Activos de una empresa: clasificación, características y ejemplos

  Fecha de actualización: mayo 2, 2022

Te contaremos sobre los activos de una empresa, que son aquellos recursos que le permiten mantener en movimiento sus procesos, aumentar su productividad, rentabilidad y ejemplos de activos de una empresa. ¡Conócelos!

Pasivos, mercancía almacenada, deudas, patrimonio neto. La lista es larga, y es que son muchos los ejemplos de activos de un negocio. Conoce a continuación los activos de una empresa, con ejemplos, para que tengas claro qué aspectos de tu negocio debes cuidar y cuáles aportan valor a tu actividad productiva. 

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¿Qué son los activos de una empresa?

En general, un activo es un recurso que usa la compañía para sacar adelante la empresa y llevar a cabo sus procesos productivos. Sin embargo, una descripción tan amplia parecería cobijar un grupo amplio de elementos de nuestra empresa, por lo que se hace necesario reducir un poco el espectro.

Para que algo sea considerado un activo, debe tener las siguientes propiedades:

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¿Cuáles son los activos de una empresa?

Activos corrientes

Su característica principal es que pueden convertirse en dinero en un período de 12 meses o menos, es decir, están a la mano. Reciben también el nombre de activos líquidos y circulantes. Ejemplos de activos corrientes son:

✅ Dinero en caja menor.

✅ Saldo en las cuentas bancarias. 

✅ Cuentas por cobrar.

✅ Inventarios.

✅ Fondos de inversión a la mano.

Activos no corrientes

Son todos aquellos que no pueden convertirse en dinero líquido en menos de un año. Aunque son muy importantes para brindar solidez a la empresa y garantizar la salud del negocio a largo plazo no pueden ser tenidos en cuenta para obtener liquidez a corto plazo. Ejemplos de activos no corrientes son:

✅ Inmuebles.

✅ Vehículos.

✅ Maquinaria.

✅ Inversiones a largo plazo.

✅ Recursos intangibles.

Ejemplos de activos intangibles de una empresa

Una categoría amplia de activos no corrientes, y que quizás requiera una explicación un poco más amplia, son los intangibles. Reconocer entre los recursos tangibles e intangibles de una empresa puede garantizarte una ventaja competitiva en tu industria.

En general, son los que no se pueden contar o inventariar de manera física pero que, sin embargo, producen beneficios económicos para la empresa. Ejemplos de activos intangibles son:

✅ Derechos de propiedad intelectual.

✅ Patentes.

✅Derechos de propiedad industrial.

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Ya que conoces los activos de una empresa, con ejemplos, debes saber que algunos activos no corrientes, como los vehículos y la maquinaria, se devalúan rápidamente y pueden significar pérdidas en el largo plazo.

Por ello, existen opciones para tercerizar procesos como la movilidad y el transporte con empresas expertas. Dichas soluciones permiten, por ejemplo, usar vehículos como si fueran propios sin asumir los gastos y las gestiones de ser los propietarios. 

Gestionar los activos de una empresa de manera eficiente es esencial para maximizar su valor y contribuir al éxito a largo plazo. Aquí tienes algunas estrategias clave para gestionar activos de manera efectiva:

1. Inventario y evaluación regular:

• Realiza un inventario detallado de todos los activos de la empresa, incluyendo activos tangibles e intangibles.
  

• Evalúa regularmente el valor y el estado de los activos para asegurarte de que estén actualizados y sean precisos en los registros de la empresa.

2. Optimización del uso de activos:

• Asegúrate de que los activos estén siendo utilizados de manera óptima para maximizar su rendimiento y productividad.

• Implementa programas de mantenimiento preventivo para prolongar la vida útil de los activos físicos.

3. Diversificación de inversiones:

• Diversifica las inversiones financieras para reducir riesgos y aumentar la estabilidad financiera de la empresa.

• Monitorea de cerca el rendimiento de las inversiones y ajusta la cartera según sea necesario.

4. Gestión de activos intangibles:

• Protege los activos intangibles, como propiedad intelectual y reputación de marca, mediante patentes, marcas registradas y prácticas comerciales sólidas.
  
• Implementa estrategias para mejorar y mantener la reputación de la marca, como la gestión proactiva de la experiencia del cliente.
  
  

5. Análisis de rendimiento:

• Realiza análisis periódicos del rendimiento de los activos para identificar áreas de mejora y eficiencia.
  
• Utiliza indicadores clave de rendimiento (KPIs) para evaluar el desempeño y tomar decisiones basadas en datos.
  
  

6. Gestión de riesgos:

• Identifica y gestiona los riesgos asociados con los activos, ya sean riesgos de mercado, tecnológicos o de otro tipo.
  
• Implementa medidas de seguridad física y cibernética para proteger los activos contra pérdidas y daños.

7. Actualización tecnológica:

• Mantente al día con las últimas tecnologías y considera la actualización de sistemas y equipos cuando sea necesario para mejorar la eficiencia y la productividad.

8. Gestión del ciclo de vida:

• Planifica el ciclo de vida de los activos y establece políticas claras para su adquisición, mantenimiento, actualización y desecho al final de su vida útil.

9. Colaboración interdepartamental:

• Fomenta la colaboración entre los departamentos de la empresa para garantizar una gestión integral de los activos, desde el departamento financiero hasta el de operaciones y marketing.

10.

Capacitación y sensibilización:

• Proporciona capacitación a los empleados sobre la importancia de los activos y cómo protegerlos.
  
• Fomenta una cultura de sensibilización sobre los activos y su valor dentro de la empresa.

De esa manera, y gracias a modelos de pago por uso, puedes dedicar tu atención al core de tu negocio mientras dejas asuntos como el mantenimiento, los impuestos y los seguros en manos de un tercero con toda la experiencia.