Fecha de actualización: Abril 13, 2022
Analiza los aspectos de tu cotidianidad que más incrementan tus gastos y reducen tu flujo de caja. Te contamos cuáles son los tipos de gastos que existen y te explicamos cómo puedes reducirlos y buscar alternativas que te permitan mejorar tu calidad de vida.
Muchas personas que quieren aumentar sus ingresos comienzan por preguntarse ¿en dónde puedo invertir mi dinero?
Cifran sus energías en ganar más dinero y comienzan a buscar la mejor forma de invertir en negocios o invertir por internet.
De esa forma, pierden de vista que la solución está frente a ellos, y olvidan explorar la primera alternativa lógica: analizar sus tipos de gasto y reducir aquellos innecesarios.
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Estos son tres de los gastos que puedes recortar mediante el uso de alternativas en el mercado. Analízalos, implementa soluciones y comienza a vivir más tranquilo.
A la hora de pensar en cómo invertir tu dinero, es un error confiar la adquisición de tus bienes al endeudamiento a mediano o largo plazo, a través de créditos para carros o de consumo, o mediante el uso de tarjetas de crédito o soluciones de desembolso exprés.
Es fácil empezar a cavar un hoyo financiero en el que el pago de intereses se convierte en una carga agobiante que mes a mes te va dejando con menos flujo de caja.
¿Cómo reducir el gasto?
Puedes empezar por evaluar los gastos que realmente necesitas hacer. Piensa por lo menos un día antes de hacer una compra por internet con tarjeta de crédito.
Si los gastos son más grandes, como un carro, busca alternativas como el renting, que te permiten usarlo, como si fueras el dueño, con solo pagar un canon mensual de arrendamiento, sin cuota inicial.
De esa manera, no afectas tu nivel de endeudamiento con soluciones de financiamiento de vehículo.
Se ha dicho que viajar es la mejor inversión en ti mismo. La buena noticia es que puede ser una opción para invertir, con poco dinero, en tu calidad de vida.
Y es que en momentos en los que el distanciamiento social es una necesidad, muchos evitan abordar aviones y recurrir a otros medios de transporte masivo.
¿Cómo reducir gastos?
Es la oportunidad para explorar lugares de interés local y nacional a los que es posible llegar en vehículo propio y con pocos gastos.
De paso, evitas usar tu tarjeta de crédito para adquirir costosos tiquetes y gastar en transportes en otros países.
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Si piensas en cómo empezar a invertir, comprar vehículo propio es una mala idea. Hace muchos años dejo de ser una inversión y se convirtió en una fuente de gastos.
Si recurres a un crédito debes pagar, como mínimo, el 10% del valor con recursos que puedes invertir en otras prioridades o alternativas de inversión (invertir en acciones es una buena idea).
Además, al sacarlo del concesionario el carro pierde hasta el 15 % de su valor, y se deprecia considerablemente cada año. Y suma a eso los gastos en mantenimiento, seguros e impuestos.
¿Cómo reducir el gasto?
Busca una solución como la renta de vehículos en donde un pago mensual te incluya los gastos relacionados (seguros, impuestos y mantenimientos) y te permita estrenar carro sin gastar tu capital ni recurrir a entidades financieras.
Además, evitas añadir a tus gastos un pasivo que se depreciará con el tiempo y afectará enormemente tus finanzas.
¿Te das cuenta de que es posible implementar soluciones sencillas para mejorar tu flujo de capital? Decídete por el renting de vehículos y dale un respiro a tus finanzas.